En Latinoamérica, según una encuesta realizada por Bumeran, 3 de cada 10 personas estuvieron expuestas o presenciaron algún tipo de situación discriminatoria en su trabajo, debido a su orientación sexual o identidad de género
Lima, Perú, 17 de junio del 2022.— A más de 50 años de la primera marcha por los derechos de la comunidad LGBTQ+ y el avance de la inclusión a nivel mundial, la discriminación de sus miembros parecería ser cosa del pasado. Sin embargo, aún se siguen presenciando actos de homofobia, bifobia y transfobia en varios rincones del mundo, incluyendo el mercado laboral.
En Latinoamérica, según una encuesta realizada por Bumeran, 3 de cada 10 personas estuvieron expuestas o presenciaron algún tipo de situación discriminatoria en su trabajo, debido a su orientación sexual o identidad de género. Mientras que las cifras aumentan cuando se trata de personas trans y no binarias: 5 de cada 10 personas sufrieron violencia y acoso en el entorno laboral debido a su identidad de género.
¿Qué rol deben tomar las empresas en este contexto? ¿Cuáles son las claves para generar un ambiente de trabajo inclusivo? Alegra.com, empresa SaaS con más de 10 años en el mercado, comparte sus consejos y experiencias en el marco del Día Internacional del Orgullo:
Evitar los prejuicios
El primer paso para generar un espacio diverso e inclusivo es eliminar los prejuicios. Sin embargo, según la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico, las personas LGBTQ+ tienen hasta 1,5 veces menos probabilidades de ser invitados a una segunda entrevista de trabajo que el resto de los candidatos, en relación a la tasa de devolución de llamadas entre solicitantes ficticios .
Con respecto a esto, Marisol López, Head of Talent de Alegra.com declara que “una cultura verdaderamente inclusiva debe brindar un ambiente cargado de seguridad, cortesía e igualdad donde todos sean bienvenidos a aportar su talento y sin que las decisiones se vean obnubiladas por los prejuicios”.
Incluir más allá de la contratación
Muchas empresas y MiPymes consideran que contratar colaboradores miembros de la comunidad LGBTQ+ es suficiente para ser una empresa inclusiva. Sin embargo, una verdadera inclusión consiste en crear un ambiente amigable en el que todos los colaboradores respeten a sus compañeros y les brinden la seguridad de poder ser ellos mismos sin sentir miedo.
El establecimiento de políticas internas con tolerancia cero a la discriminación en todos los niveles es un paso que las empresas deben dar así como también el compromiso con las necesidades particulares de las personas LGBTQ+ en el ambiente laboral. Por ejemplo, la creación de espacios seguros, de debate y construcción para generar propuestas inclusivas es una iniciativa que empresas como Alegra.com implementan en su día a día.
Generar igualdad de oportunidades
Escalar en la pirámide organizacional suele ser uno de los mayores desafíos para los colaboradores en general y sobre todo para quienes no son parte del Status Quo ya que se enfrentan al fenómeno del techo de cristal. De acuerdo con un estudio realizado por la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico, los miembros del colectivo tienen un 11% menos de probabilidades de ocupar un puesto directivo alto.
Así, asegurarse de que todos los colaboradores puedan ser evaluados de manera objetiva y tengan la posibilidad de desarrollarse profesionalmente es una de las principales tareas que los empleadores deben tener en cuenta si buscan ser portavoces de la igualdad.
Las empresas tienen la oportunidad de comprender la realidad del colectivo y convertirse en aliados del cambio promoviendo un gran impacto social donde las personas se sientan incluidas y sobre todo acompañadas en su lugar de trabajo indistintamente de su autopercepción”, agrega López.
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