En esta crítica teatral, Rey Yacolca nos hace reflexionar que no todo es risa en la puesta de escena de «Cuando calienta el sol». La obra utiliza la comedia como un disfraz que, al caer, expone la crudeza de los recuerdos y la tensión entre lo que fuimos y lo que aún cargamos.
Lima, Perú, 23 de septiembre de 2025.— El teatro, cuando decide disfrazarse de playa, no solo nos invita a la brisa y al descanso. La playa es también un territorio ambiguo: lugar de encuentro y despedida, de juegos y naufragios, de confesiones que el oleaje arrastra pero nunca termina de borrar. Allí, bajo la música de las olas, emergen las verdades que evitamos en la rutina. «Cuando calienta el sol» convierte este espacio en metáfora de la vida: un reencuentro de promoción que, en apariencia ligero, se transforma en espejo de lo que fuimos y de lo que aún no nos atrevemos a soltar.
Han pasado quince años desde aquella última foto de colegio, y aunque el tiempo ha dibujado arrugas, cicatrices y nuevas historias, los chismes —como brasas enterradas en la arena— permanecen calientes. La dramaturgia de César Carrión utiliza el humor como herramienta para desnudar fragilidades, y logra que el público reconozca en cada gesto y palabra a esos compañeros de aula que todos hemos tenido. No hace falta llamarlos por nombre; basta con verlos actuar para que se encienda la memoria colectiva.
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Elenco coral
El grupo de actores funciona como una comparsa escénica. No se trata de individualidades, sino de un engranaje en el que cada uno aporta un matiz: la euforia, el sarcasmo, la ternura, la exageración cómica. Juntos provocan carcajadas y, al mismo tiempo, destilan silencios incómodos que nos recuerdan que debajo de la risa siempre hay heridas. El público termina viéndose reflejado: todos llevamos una “promoción” dentro, con su mezcla de afecto, rivalidad y recuerdos imposibles de borrar.
Música y ritmo
Aquí, la música no es un simple fondo: es banda sonora de la vida. Las canciones se convierten en detonantes de memoria colectiva, en guías emocionales que conducen al público hacia el mar, hacia esa playa simbólica donde los recuerdos regresan una y otra vez. Cada acorde abre una puerta, cada letra se vuelve un espejo, y la sala entera vibra como si todos estuviéramos recordando nuestra propia juventud perdida. La dirección de Xiomara Salvatierra y Pablo Chamochumbi entiende esta potencia y la coloca en el centro del ritmo de la obra, sosteniendo un montaje que fluye como una ola: rápido, festivo, pero cargado de sal y de huellas.
Escenografía y metáfora
El escenario se convierte en playa, y los objetos —pelotas, flotadores, sombrillas— son restos de una juventud que insiste en sobrevivir. La arena no solo sirve para jugar: es archivo y cicatriz. Guarda lo que fuimos y devuelve lo que nunca terminamos de soltar.
«Cuando calienta el sol»: Mi reflexión
«Cuando calienta el sol» no es solo una comedia para reírse en grupo. Es también un recordatorio de que crecer no significa olvidar, sino aprender a convivir con lo que fuimos. La música, las risas y los silencios dibujan un mapa de nuestra propia historia, esa que todos llevamos tatuada en la memoria. Y aunque el tiempo pase, los reencuentros nos demuestran que las máscaras se caen con la misma facilidad con que el sol derrite la cera en la piel.
En definitiva, la producción de Butaca Roja logra un montaje cálido y entrañable: la playa como escenario de risas y confesiones, la música como guía hacia el mar de los recuerdos, y el teatro como un sol que ilumina sin piedad las cicatrices que nunca terminamos de enterrar en la arena.
Si alguna vez te reíste de un chisme de colegio, si alguna vez volviste a ver a un amor del pasado o si simplemente quieres recordar que la vida también se vive con humor y canciones, no te pierdas esta obra.
La playa ya está lista, el sol calienta… y el teatro te espera para que tú también seas parte de este reencuentro.
Para la Agenda
- Lugar: Teatro Ricardo Roca Rey – Asociación de Artistas Aficionados (Jirón Ica 323, Cercado de Lima)
- Funciones: 20, 21, 26, 27 y 28 de septiembre
- Horarios: Viernes y sábados 8:00 p. m. | Domingos 7:00 p. m.
- Entradas: Joinnus (+ comisión), WhatsApp 955134875, Instagram @butacarrojaTeatro o boletería del teatro (una hora antes de la función).
Acerca de Rey Anthony Yacolca Gomez
Rey Anthony Yacolca Gomez, chalaco de nacimiento, ostenta estudios superiores de ciencias de la comunicación, durante su joven trayectoria ha alcanzado grandes logros a nivel nacional e internacional como ganar el festival internacional de la “Noche de los Cortos” en la categoría a “Mejor cortometraje universitario peruano“, al competir con las más prestigiosas universidades del país, también logró llevarse el premio a “Mejor dirección y guion“. Haciéndose merecedor a una beca para participar del taller de guion del cineasta argentino Ivan Tokman (Galardonado cineasta y ganador del Festival Internacional de Cine de Mar del Plata). A su vez ganador del festival nacional “Cortos de vista” realizado en la ciudad de Chiclayo en su categoría “Mejor Guion“. Conferencista a nivel nacional y poeta, ha participado en innumerables certámenes de poesía representando al Perú y prologado varios libros de poemas entre los que se encuentran los libros del poeta limeño de ascendencia italiana Luciano Lértora, poeta que alcanzaría gran fama dentro de los grupos literarios Miraflorinos, debido a su extensa obra de gran calidad poética. En la actualidad se encuentra cursando estudios avanzados de psicología en la Universidad Privada del Norte, desempeñándose también como docente a nivel escolar y dando talleres de motivación, oratoria, poesía y teatro. Desde el 2017 también tiene el cargo de Director Multimedia & Redes Sociales en la prestigiosa Revista IT/USERS®.